16/8/10

TOO WHITE III



2 comentarios:

Unknown dijo...

Cuando a mí me daban radioterapia en lo que menos pensaba era en tomar fotos... pero recuerdo que había una imagen de un paisaje, que eventualmente me empezó a provocar náuseas.
Después iba al trabajo, y vomitaba en el baño de la oficina.
Ahora cada vez que huelo algo que me recuerde el hospital, me dan náuseas. Y odio las fotos de los paisajes, especialmente las mal impresas.

MICHELLE FURLONG dijo...

uyyy a mi me pasa lo mismito con los olores, siempre me provocan nauseas,
eso, y el chayote cocido no lo soporto!